Ante la amenaza de una ola de calor (como si no hiciera ya suficiente), el mejor consuelo que se me ha ocurrido es esta receta de helado de dulce de leche. Y es que no solo está riquísimo, sino que es una forma muy refrescante de sobrellevar estas temperaturas.

Tengo que contaros que me he comprado una heladera. Puede ser que el hecho de haber empezado a vivir en Sevilla y la amenaza de calor constante hayan influido en mi decisión pero lo cierto es que no puedo estar más contenta. La heladera hace mucho más cómodo y rápido el proceso de hacer helados y, como tengo la firme intención de hacer muchos y muy variados, terminé cayendo en la tentación de hacerme con una. Pero los que no tenéis heladera no os preocupéis porque voy a daros la receta de este helado con y sin heladera para que todos lo podáis disfrutar.

RECETA DE HELADO DE DULCE DE LECHE

INGREDIENTES

• 300 ml de leche
• 400 ml de nata para montar
• 500 g de dulce de leche
• 1 cucharadita de vainilla
• 1 cucharada de miel

PREPARACIÓN:

1. Mezcla en un cazo la leche, el dulce de leche, la miel y la vainilla. Mantenlo a fuego medio removiendo constantemente durante unos 10 minutos o hasta conseguir una mezcla homogénea y espesa.
2. Refrigera la mezcla durante 3 o cuatro horas hasta que esté bien fría.
3. Monta la nata con la ayuda de una batidora.
4. Incorpora la nata a la mezcla de leche, dulce de leche, vainilla y miel con movimientos suaves y envolventes.
5. Si tienes heladera: vierte la mezcla en la heladera y deja mantecar el helado durante unos 40 minutos. A continuación, vierte el helado en un recipiente apto para congelador y congélalo hasta alcanzar la consistencia deseada.
6. Si no tienes heladera: vierte la mezcla en un recipiente apto para congelador y congélalo. Durante las primeras 4 horas deberás sacar el helado cada media hora y batirlo enérgicamente. Así conseguirás romper los cristales de hielo y obtendrás un helado cremoso.

TRUCOS Y CONSEJOS

• Es muy importante que la mezcla de ingredientes esté bien fría antes de meterla en la heladera para conseguir un buen resultado.
• Cuando vayas a montar la nata, recuerda que tengo la nata como el bol y las varillas deben estar bien fríos para evitar que la nata se corte en el proceso.

Como veis, hacer helados no tiene tanta complicación como parece. Lo que más cuesta es lanzarse a hacerlo pero os puedo asegurar que una vez hayáis hecho vuestro primer helado, vais a querer seguir haciendo más y más. Y para saciar nuestras ansias heladeras os prometo que voy a seguir llenando el blog de recetas de helados.

Besos para todos a hacer helados para hacer frente al calor!!

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