MARSHMALLOWS O NUBES DE VAINILLA Y COCO
Estoy muy pero que muy contenta de traeros esta receta. ¡¡¡He hecho mis propias nubes caseras!!! O marshmallows, si nos ponemos en plan americano, que queda muy profesional y además es una palabra que me encanta. Casi me gusta tanto como los propios marshmallows. Y es que las nubes son una de mis chuches preferidas. Siempre he soñado con ir a uno de esos campamentos americanos a sentarme con los demás niños alrededor de una hoguera y pinchar marshmallows en brochetas, fundirlos acercándolos al fuego y comérmelos entre dos galletas con chocolate. Esa imagen tendría que salir en el diccionario al lado de la palabra ‘felicidad’.
Pues felicidad es lo que sentí también al hacer esta receta y ver que salen unas nubes taaaan ricas, y son taaaan suaves, blanditas, dulces, esponjosas y FÁCILES que no me puedo creer que no las haya probado antes. Estas han sido las primeras que he hecho, pero os aseguro que en mi mente ya están dando vueltas muchas ideas y que veréis más nubes por aquí.
De momento os enseño esta receta hiper fácil que he adaptado del blog de Sandra Mangas, ‘La receta de la felicidad’, y que no utiliza ingredientes ni aparatos extraños. Llámese extraño a todo aquello que no podemos encontrar fácilmente en cualquier supermercado o tienda y que, a mí personalmente, me hace archivar una receta en la carpeta de pendientes y dejarla ahí hasta el infinito. En este caso, los culpables eran el sirope de maíz, la glucosa y el termómetro de cocina que aparecían en todas las recetas de marshmallows que había visto en internet. Pero esta receta solo lleva azúcar, agua y gelatina. Y los sabores que queráis utilizar. Yo he elegido hacer las nubes de vainilla, porque el marshmallow clásico es de vainilla y quería serle fiel, y rebozarlas en coco en vez de azúcar glas como es lo habitual. Además las he hecho con forma de conejito de Pascua porque la Semana Santa está ya a la vuelta de la esquina 🙂
RECETA DE MARSHMALLOWS O NUBES CASERAS
INGREDIENTES:
- 250 ml de agua
- 400 g de azúcar
- 20 g de gelatina neutra en láminas (12 láminas)
- 2 cucharadas de vainilla
- Coco rallado
PREPARACIÓN
- En primer lugar, coloca 125ml de agua en un bol junto con la gelatina, para hidratarla.
- Mientras la gelatina se hidrata, vierte los 125 ml de agua restantes en un cazo junto con el azúcar y remueve a fuego medio hasta que la mezcla hierva.
- En ese momento, retira el cazo del fuego y añade el agua con la gelatina hidratada.
- Vuelve a colocar el cazo en el fuego y remueve de nuevo hasta que la mezcla vuelva a hervir.
- Retira el cazo del fuego y coloca la mezcla de agua, azúcar y gelatina en un bol. Deja que repose durante una hora aproximadamente hasta que alcance la temperatura ambiente.
- Una vez la mezcla se haya templado, bate con una batidora de varillas durante 10 minutos a máxima potencia. Añade la vainilla en los primeros minutos de batido. Al final tienes que conseguir que la mezcla monte y adquiera un color blanco brillante.
- Engrasa una bandeja o recipiente rectangular de unos 20x30cm aproximadamente con spray antidesmoldante (o, si no tienes, con mantequilla o aceite) y espolvorea coco rallado.
- A continuación, vierte la masa de los marshmallows en la bandeja y extiéndela bien por toda su superficie. Deja que repose durante 4 horas a temperatura ambiente para que la gelatina haga su trabajo y coja consistencia.
- Pasado ese tiempo, corta tus marshmallows o nubes con la forma que más te guste y rebózalos en coco.
TRUCOS Y CONSEJOS
- Puedes utilizar tanto pasta como aroma de vainilla. O incluso una vaina de vainilla (en este caso, incorpórala en el momento de hervir el agua con el azúcar).
- Si lo prefieres puedes rebozar tus marshmallows en azúcar glas, en una mezcla de azúcar glas y maicena o incluso bañarlos en chocolate. ¡Hay infinitas posibilidades!
- Cuando vayas a cortar los marshmallows, engrasa el cortador que vayas a utilizar, o el cuchillo si vas a hacerlos de forma cuadrada.
Nota: estos marshmallows están tremendamente deliciosos y crean adicción. Evitar si se ha iniciado la operación bikini.
No os podéis ni imaginar lo feliz que soy tras haberlos hecho. No me los puedo quitar de la cabeza y no paran de llegarme ideas deliciosas a la mente que espero poner en práctica muy pronto.
Espero que os haya gustado la receta y que la hagáis. Por Dios, hacedla, es tan fácil que no os lo vais a creer. Y pocas cosas dan tanta satisfacción en esta vida como hacer marshmallows caseros, os lo aseguro 🙂
Muchos besos para todos!
Qué bonitos te han quedado tus marshmallows! Casi da pena comérselos! 🙂
Muchas gracias! Pero no te creas, con lo buenos que están se pasa la pena jajaja 🙂
Me chiflan las nubes y nunca se me había ocurrido hacerlas, pero con lo bien que lo explicas y lo bonitas que quedan creo que me voy a animar. Muchas gracias por la receta!
Muchas gracias a ti! Qué bien, pues espero que te gusten mucho y que me cuentes qué tal 🙂 Un beso!
Son maravillosas y espero con ansia nubes de más sabores. Jajaja
Llegarán pronto jajaja Besos 🙂
Que recetan tan chula!!! Me encantan esas nubes con forma de conejito son tan ❤❤❤ que da pena comerlas!! Gracias por la idea!! Besos
Muchas gracias Lidia, me alegro mucho de que te gusten 🙂 Par mi han sido un gran descubrimiento, con lo que me gustan las nubes!! Un beso!