ROSCÓN DE REYES
¡Hola a todos! Espero que hayáis empezado genial el 2018, que estéis disfrutando de las fiestas y de los días en familia y… ¡que hayáis sido buenos durante el año, porque los Reyes Magos están de camino y más cerca que nunca!
No os podéis ni imaginar la ILUSIÓN que me hace estar escribiendo esta receta. Y digo ILUSIÓN con mayúsculas, porque es mucha y estoy muy contenta. En primer lugar, porque me encantan la noche y el día de Reyes. Es una fecha súper especial para mi, que sigo viviendo con la misma emoción que cuando era pequeña, año tras año. Me encanta toda la magia que rodea esta noche, preparar la carta a los Reyes, ir a verles a la cabalgata, poner los zapatos debajo del árbol, prepararles un festín para que repongan fuerzas (porque, si, en mi casa somos muy exagerados y más que un tentempié nocturno parece más un desayuno de buffet de hotel), dejarles agua a los camellos, los nervios a la hora de ir a dormir, despertar por la mañana con emoción y hacer ruidos “sutiles” para que se despierte el resto de la familia e ir todos juntos corriendo a abrir los regalos… Y el roscón.
El hecho de que esta receta, la primera del año, sea una receta de Roscón de Reyes me hace inmensamente feliz. Creo que hoy, día 2 de enero, ya he cumplido mi principal propósito de año nuevo, un propósito que me había saltado con mucha pena los años anteriores. ¡No me digáis que eso no es para estar feliz!
Os pongo en situación para que entendáis porqué no había hecho un roscón hasta ahora. El caso es que me encanta el roscón. Bueno, voy a matizar este punto: el Roscón de Reyes es un dulce que me gusta comer porque tiene la esencia de la Noche de Reyes. Solo lo como el día 5 de enero por la noche y el día 6 por la mañana, y tengo que volver a esperar todo un año para volverlo a comer, al igual que tengo que esperar todo un año para que vuelvan a venir los Reyes Magos.
Pero es cierto que nunca me veréis cortar un trozo de roscón y comérmelo sin más. Mi proceso de ingesta de roscón suele ser el siguiente:
- Evaluación de la textura. Si el roscón es blandito y de color clarito, vamos bien. Este roscón es el perfecto, y me gusta sin relleno, porque voy a devorarlo mojándolo en chocolate. Si no hay chocolate, necesitaré que el roscón esté relleno de trufa o de nata (o de una mezcla de ambas) para poder esconder mi pena por la falta de chocolate caliente.
- Eliminación de decoraciones. Por norma general, me molesta la presencia de las frutas confitadas en el roscón. Y no es porque no me guste la fruta confitada, sino porque normalmente los trozos son tan grandes que eclipsan el sabor del roscón. También me molestan los pegotes de azúcar que decoran los roscones. Normalmente, al mojar el roscón en chocolate, hay un elevado porcentaje de probabilidades de que esos pegotes se separen de la superficie del roscón y se queden flotando en el chocolate, cosa que no me hace ninguna gracia. Por lo tanto, si me ha tocado un trozo con fruta confitada, la quito y me la como lo primero. Después, quito los pegotes de azúcar (éstos ya sí que se quedan en el plato), y luego me como el roscón.
- Ingesta masiva y descontrolada de roscón con chocolate. Probablemente me coma un mínimo de dos trozos hermosos, con la esperanza de que me salga alguna figurita que aumente mi alegría. Si no me salen figuritas, seguiré comiendo roscón hasta que me salga alguna.
El caso es que, como el momento de comer el roscón es tan especial para mi y soy tan crítica con él, me daba miedo arriesgarme a hacer por primera vez una receta tan importante y que me saliera mal. Así que todos los años lo posponía al año siguiente, pero nunca llegaba el momento. Hasta este año. Confieso que he hecho varias pruebas de roscones este otoño, para evaluar las texturas tanto el día del horneado como al día siguiente. He leído mucho sobre roscones, en muchos blogs y en libros de recetas, y finalmente me he quedado con la receta que os enseño.
Como veis en las fotos, la decoración no es la tradicional. La he hecho por franjas, para que cada persona pueda elegir la que más le guste. He utilizado almendra laminada, almendra crocante y naranja y mandarina confitadas y cortadas a trocitos (ya os he explicado mi trauma con los trozos de fruta gigantes). También os enseño el roscón sin relleno (perfecto para mojar en chocolate) y con un relleno de trufa a la naranja que está para morirse de bueno. Con esta receta participo en el reto dis-fruta de este mes, cuya fruta son los cítricos.
RECETA DE ROSCÓN DE REYES
INGREDIENTES:
PARA EL PREFERMENTO:
- 120 g de harina de fuerza
- 120 ml de leche entera
- 10 g de levadura deshidratada de panadería (o, si lo preferís, 25 g de levadura fresca).
PARA LA MASA:
- El prefermento
- 380 g de harina de fuerza
- 2 huevos L
- 70 g de azúcar
- 50 g de miel
- 1 pizca de sal
- 1 cucharadita de agua de azahar
- ralladura de una naranja
- ralladura de un limón
- 80 g de mantequilla
PARA LA DECORACIÓN:
- Almendras laminadas
- Almendras crocanti
- 1 naranja confitada (podéis hacerla con esta receta)
- 1 mandarina confitada
PREPARACIÓN:
- En primer lugar, prepara el prefermento. Para ello, calienta un poco la leche para que esté tibia (no caliente) y mézclala con la harina y la levadura. Deja que repose durante toda la noche.
- A la mañana siguiente, la masa habrá aumentado su tamaño y estará llena de burbujas. Es el momento de añadir todos los demás ingredientes, excepto la mantequilla.
- Amasa durante 15 minutos, con paciencia y constancia. La masa empieza siendo pegajosa pero se irá volviendo más manejable.
- A continuación, añade la mantequilla cortada en dados y vuelve a amasar durante otros 15 minutos. Pasado este tiempo, es recomendable realizar la llamada prueba de la membrana: al estirar la masa, ésta deberá ser elástica y no romperse. Si es así, pasa al siguiente paso, si no lo has conseguido, sigue amasando unos minutos más y repite la prueba.
- Haz una bola con la masa y colócala en un bol engrasado con aceite y tapado con film transparente (también engrasado). Déjala reposar durante unas 2 o 3 horas, hasta que haya doblado su volumen.
- Cuando la masa haya levado hasta el punto de doblar su volumen, desgasifícala (quítale el aire que se ha formado en su interior aplastándola con las manos).
- Prepara una bandeja de horno con un papel de horno y coloca la masa sobre ella.
- Introduce un dedo en el centro de la bola de masa y empieza a abrirlo poco a poco hasta darle forma de roscón.
- Dale le vuelta al roscón para unir las grietas que se han formado en la masa por la parte de abajo. Si no vas a rellenar el roscón, es el momento de añadir las figuritas.
- Vuelve a darle la vuelta al roscón, dejando la superficie lisa y más bonita hacia arriba.
- Tapa el roscón nuevamente con un film transparente engrasado con aceite y déjalo reposar otras 2 o 3 horas hasta que doble su volumen.
- Cuando el roscón haya levado, pincela con huevo toda su superficie y coloca las decoraciones.
- Hornea durante 25 minutos a 180ºC.
- Una vez finalizado el tiempo de horneado, saca el roscón del horno y déjalo enfriar sobre una rejilla.
RECETA DEL RELLENO DE TRUFA A LA NARANJA
INGREDIENTES:
- 400 ml de nata para montar (con un 35% de materia grasa)
- 200 g de chocolate negro
- 2 cucharadas de azúcar
- ralladura de una naranja
PREPARACIÓN:
- Calienta la nata en un cazo.
- Mientras la nata se calienta, trocea el chocolate y colócalo en un bol resistente al calor.
- Cuando la nata esté caliente, viértela sobre el chocolate troceado y espera unos segundos. Remueve hasta que el chocolate se derrita por completo y se mezcle con la nata.
- Añade la ralladura de naranja y mezcla bien.
- Deja enfriar a temperatura ambiente y después refrigera.
- Cuando la mezcla esté bien fría, prepara tu batidora y bate a velocidad media. Ve subiendo la velocidad poco a poco.
- Cuando la trufa empiece a montar, añade las dos cucharadas de nata y sigue batiendo a velocidad alta hasta que esté bien firme.
- Corta el roscón por la mitad y rellénalo con la trufa a la naranja.
TRUCOS Y CONSEJOS:
- Con este procedimiento, tendrás tu roscón listo a la hora de comer, y podrás rellenarlo por la tarde. En mi casa empezamos el roscón el día 5 por la noche, por lo que este horario es perfecto para dejarlo hecho antes de la cabalgata y comerlo a la vuelta. Si no es tu caso, puedes jugar con los tiempos levado. Puedes, por ejemplo, hacer el prefermento el día anterior por la mañana y mezclar la masa por la tarde; o hacer el prefermento por la tarde y mezclar la masa por la noche. Para alargar los tiempos de levado y que en vez de 2-3 horas tarde más tiempo, puedes meter la masa en la nevera, y el frío hará que la masa tarde más en subir. De este modo, puedes dejar el último levado actuando por la noche, y hornear el roscón por la mañana.
- Si decides alargar los tiempos de levado metiendo la masa en la nevera, ten en cuenta que deberás dejarla volver a temperatura ambiente antes de hornearla. Te recomiendo sacar la masa de la nevera una hora antes de hornear. Mientras tanto, puedes aprovechar para preparar el desayuno y precalentar el horno.
- Si te decides a probar el relleno de trufa a la naranja, asegúrate de que la nata, las varillas, y el recipiente donde vayas a montar la trufa estén bien frios. Un buen truco es meter a la nevera las varillas de la batidora y el bol.
Espero que os haya gustado mi primera receta del 2018 y que, como yo, os animéis a hacer un delicioso roscón casero este año. ¡Seguro que si esperáis a los Reyes Magos con semejante roscón os dejan muchos regalos!
¡Muchos besos para todos y feliz noche y día de Reyes!
Yo también soy una apasionada de los roscones me encanta comerlos el día de reyes en el desayuno, pero si que es verdad que hay roscones y roscones, y como el casero no he probado ninguno. Gracias por la receta Cris, y gracias por participar. Te deseo un feliz año!! Y que te traigan muchos regalos los reyes!! BEsos
Muchas gracias Lidia! Espero que hayas disfrutado mucho del día de Reyes y que te hayan traído muchas cosas! Y, lo más importante: que hayas comido mucho roscón!! jeje muchos besos 🙂
Que rico roscón para la noche más mágica del año. Feliz día de Reyes para todos. Cris qué ganas de comerlo todos juntos.
Me da pena que se haya acabado, ahora tengo mono de más roscón 😀
Cris, desde que nos conocimos en la despedida de Bea visito de vez en cuando tu blog, pero tras ver que eres tan purista del roscón como yo creo que voy a venir cada vez mas a menudo.
Muchas Gracias 🙂
Jajaja es que los roscones son un mundo a parte!! Qué ilusión saber que visitas el blog de vez en cuando, y que eres un purista de los roscones 😉 La Navidad que viene nos volvemos a juntar y comemos roscón! Un abrazo
No había tenido la oportunidad de pasarme por aqui y darte las gracias. Este año me he aventurado a hacer mi primer roscón, con tu receta, y en casa me hicieron la ola!! Maravilloso trabajo, muchisimas gracias!
Ay, muchísimas gracias! Me alegro un montón de que hayas confiado en mi receta del roscón, me hace muchísima ilusión!! Para mi el roscón es super importante, así que no sabes la alegría que me da. Muchos besos!
Me encanta tu receta de roscón. No tuve la oportunidad de hacerlo para el día de Reyes (ese día en mi casa siempre hay mucho ajetreo con los niños, los regalos, la cabalgata, etc). Pero dentro de dos semanas es San Valero y ahí ya si que no se me escapa hacerla! Tendrías que venir a Zaragoza ese dia, por lo que veo te encantan los roscones y seguro que lo disfrutarias mucho.
Gracias por tus recetas, tus fotos y tus historias, son una maravilla.
Pepi
¡Qué guay! Me hace mucha ilusión leer tu comentario, espero que te animes y pruebes la receta, ¡¡y ya me contarás qué tal!!
Pues yo viví en Zaragoza de pequeña, ¡¡y hasta parte de mi familia es de allí!! Hace mucho tiempo que on voy, pero la verdad es que tengo muchas ganas. No es mala idea la de ir en San Valero 😉
¡Muchos besos!